La búsqueda del Guardián I

jueves, 20 de mayo de 2010

Diario de una Bellota

Aviso: Si estás leyendo este diario, más te vale dejarlo donde estaba. Que sepas que estás leyendo algo privado y que no está bien que andes fisgoneando en las cosas de los demás y debería caersete la cara de vergüenza. Y que sepas que como lo has tocado, acabas de ser hechizado para que te encuentre cuando quiera y te convierta en sapo, por cotilla

20 de Mayo


Querido diario:

Soy yo, Bellota. Bueno, qué tontería, claro que soy yo. No sé cuanto tiempo llevo aquí en Hibergarde, pero me parece una vida entera, sobre todo desde que Bálsamo Trisaga... desde que se fue.
Todavía estoy muy triste, es como si un vendaval se hubiera llevado mi alegría y ahora me siento extraña. La echo mucho de menos y estoy al mismo tiempo triste y furiosa, porque ella menos que nadie se merecía morir de esa manera. No se merecía morir en absoluto, o a lo mejor es que para mí, no podía morir, era eterna... Siempre lo será...

Angeliss sigue yendo de un lado a otro, aunque duerme aquí todos los días. El niño es tranquilo y no llora demasiado, pero no me atrevo a tocarlo por si le contagio algo. Ya sé que Bálsamo dijo que no era una enfermedad común, que no se podía contagiar, pero prefiero no arriesgarme.

Cada vez me acostumbro más a... esto, aunque por las noches, a veces, me da la impresión de que palpita y se estremece, aunque no avanza. Procuro no mirarme al espejo, y si tengo que salir de la posada por alguna razón, llevo siempre la capucha caladísima, y me pongo el pelo para cubrir las marcas. La gente se asusta cuando las ve, o les da asco y me tratan como si fuera un bicho de la peste, o algo peor. Quiero que desaparezcan ya, quiero volver a ser normal, quiero no tener esto en la cara, ni tener ese ojo tan asqueroso que parece más de un monstruo que mío. Angel dice que no piense en ello, que me tiene que dar igual lo que diga la gente, pero no es tan fácil.

Tengo dieciséis años y soy horrible.

Tampoco puedo decir que haya hecho avances con lo otro, aunque he aprendido a controlar las explosiones de energía arcana y ya no destrozo la habitación cuando tengo pesadillas. También he sido capaz de conjurar un poco de agua, pero sabía a podrido y tuve que tirarla. Los dedos ya no tiemblan, ya no hay chispas.

De todas formas, sigo teniendo pesadillas. A Angel no se lo he dicho porque no quiero preocuparle y como ya no dormirmos juntos, puedo disimular bastante bien. A veces me regaña porque me despierto muy tarde por la mañana, casi al mediodía, y me invento excusas. No voy a decirle que sigo soñando. A Dremneth tampoco.

No hago más que darle vueltas a la carta que me envió Bálsamo.

20 de Abril

Mi muy querida niña:

Lamento haberme ido tan precipitadamente, pero mis deberes me reclaman. El Templo de Elune me ha enviado a los bosques de mis ancestros para que auxilie a mis hermanos en tiempos de guerra, y sé que tú estarás bien, aunque si me necesitaras, no tienes más que decírselo a Dremneth y él me lo hará saber para que pueda venir a tu lado.
Sé que eres fuerte, mi Zoe, y sé que si perseveras con tus estudios, aprenderás a controlar la energía que se ha acumulado en tí durante tu trance. Angeliss puede ayudarte con eso, ya que él tiene un control magistral sobre la energía arcana de la que está imbuido. También Dremneth, aunque de otro modo.

De todos modos, puesto que me dirijo a Astranaar, en el bosque de Vallefresno, quiero aprovechar para buscar a un sabio de mi raza (recuerda "Kal´dorei" es más correcto que "elfo"), un druida llamado Ursoth que, según se dice, tiene grandes conocimientos sobre el Sueño y la Pesadilla, y puede ayudarnos a entender lo que te sucedió y evitar que suceda de nuevo. Cuando le encuentre, le hablaré de tí y haré lo posible para que acepte tomarte como protegida, puesto que nadie puede necesitar un tutor como el Guardián como lo necesitas tú.

Ve con la luz, mi querida niña.

Bálsamo Trisaga



Me pregunto si logró dar con él antes de morir ¿Debería buscarle? ¿Contarle lo de mis sueños?

Ojalá Bálsamo estuviera aquí...

No hay comentarios: